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Boda Thompson: Jacklovicus y Mávira Thompson
Imagen de Boda Thompson: Jacklovicus y Mávira Thompson
Información del evento
Fecha 09/02/2014
Lugar Gilneas
Participantes
Arehucas Thompson
Berhtrhram
Malie Chspafuego
Marseline Thompson
Montana Marbury
Neyara Thompson
Nyah Thompson
Myrall Thompson
Vladimirius Thompson
Promotores

Introducción[]

El inicio de la velada tuvo lugar en el pequeño acantilado situado al este del territorio gilneano. Para la ocasión, se transportó algunos bancos desde la mansión Thompson (posiblemente prestados, años atrás, por la catedral gilneana). El lugar quedó ornamentado con un enrejado de flores, una pequeña mesa con algunos canapés, entrantes y vinos, algunos pétalos de rosa negra y roja esparcidos por el suelo y un toldo (colocado a conciencia ante la inminente lluvia).

Posteriormente, el banquete aconteció en la Mansión Thompson. Los invitados y comensales pudieron disfrutar de una espléndida cena, servida en menaje de oro y varias tartas de diferentes sabores. Se ha de recordar el exquisito vino añejo, “reserva de la familia”.

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"Saliendo de casa bien peiná" La novia y la comitiva. En el sidecar, junto a su abuelo.

La llegada[]

Era perceptible el bullicio y nerviosismo cuando el novio aterrizó frente al improvisado altar a lomos de un gólem aéreo, que permaneció, durante toda la velada, sobrevolando las cabezas de los invitados como una mera y nada importante medida de “mínima seguridad”.

Posteriormente y con el “Cañón” de Pacarbel, apareció la novia, radiante, a lomos del sidecar de la Meca- Harley de su abuelo, vestida de un blanco “roto” deslumbrante, con un ramo de rosas a juego y un tocado sencillo que Luz sabe el tiempo y disgustos que habría costado. La novia bajó y, recogida por su padrino, Ian Samuels (sureño de apariencia pero de espíritu alto) y caminó al ritmo de la curiosa melodía hasta el altar, donde la esperaba el novio, acompañado de su hija adoptiva Marseline.

La ceremonia[]

La ceremonia transcurrió tranquila, sin pena ni gloria y siguiendo el típico esquema Thompson:

hecho insólito – discurso proemial – hecho insólito – resolución sorpresiva.

Al ritmo del Cañón se pudo observar cómo Darmer (famoso gnomo y reconocido amigo de la familia Thompson, miembro de Llama en la Oscuridad, chófer oficial de la Casa y mano derecha de Pinaroth Thompson) caía desde los cielos ataviado con un paracaídas, entrando triunfalmente en escena. Tras un pequeño discurso inicial sobre la “buena familia”, la castidad, la pureza antes del matrimonio y lo atroz sobre la práctica de endogamia entre congéneres de la misma herencia génetica, cuando parecía que la ceremonia iba a entrar en meollo de la cuestión, una voz se alzó. De entre la muchedumbre y tras una cabeceada de anciano, el verdadero sacerdote se levantó. Caminó en dirección al púlpito y, con aspavientos varios, largó al gnomo, dispuesto a oficiar la ceremonia y disgustado por la pérdida de protagonismo.

La primera parte de la ceremonia se ofició tranquilamente, mientras el gólem planeaba al compás de la obra de Pacarbel, haciéndose notar con el sonido de la carga de ojivas de “bombas racimo” y la fijación de proyectiles de uranio empobrecido en determinados objetivos humanos, identificados por la máquina como “posibles e improbables amenazas detectadas (todo por seguridad de los novios e invitados a la ceremonia). Si hemos de encontrar algún calificativo para definir el acto, no dudamos, en ningún momento, en escoger los adjetivos “breve”, “distendido”, “tranquilo” y “relajado”.

El oficio concluyó con el ofrecimiento de los anillos a la pareja (por parte del gólem) y el pronunciamiento de los votos, que quedaron sellados por un emotivo beso coreado por un aplauso del pópulum.

Algunas inconveniencias[]

Para sorpresa de todos, algunos invitados cayeron al suelo, inconscientes, en el momento cumbre de la clausura de la celebración. Al principio se pensó, con toda lógica, que la emotividad y empatía de estos invitados se había visto superada por la presión del momento y la tensión ambiental. La idea pareció desecharse cuando, de los cuerpos inertes de estas personas, comenzaron a materializarse espectros (de poca verborrea y lentos movimientos) que buscaron abalanzarse sobre el resto de personal en busca de “cerebros” y demás vísceras que corromper. Hasta el tan nombrado gólem aéreo (protagonista de la velada), despegó en modo de seguridad.

"El algoritmo del miedo" es cosa de gnomos -declaró el novio, despidiendo a su proyecto con la mano.

Cuando la muerte parecía inminente, Ian Samuels, padri

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"Hala qué liada" -Pinareth Thompson

no de la boda, cobreador profesional y espíritu gitano (y por lo tanto, ducho en tradición y sabiduría popular) arremetió, imbuido por un espíritu lógico- premonitorio, contra el sacerdote, que cayó por el acantilado estrepitosa y escandalosamente. Los espectros se evaporaron y, en ese momento de incertidumbre, un enorme razascarcha apareció con un alarido, desde el precipicio, cabalgado por el cura.

El colectivo Thompson, montado en cólera, arremetió contra él, liderados por la novia (Mávira) que, alpargata en mano, quiso darle “por el lado, que raspa”. Invitados y familiares redujeron al objetivo en una “paliza gitana” que inhabilitó al sacerdote. Sus pertenencias fueron hurtadas (toga, calzado y cartera, así como demás utensilios de valor).

Sólo le dejamos los calzoncillos y porque hacía frío - declara una de las asistentes.

Cuando el episodio parecía que concluiría con una agradable justicia poética, apareció Pinareth Thompson y, alpargata en mano, consiguió liberar al maleante de las garras sádicas del público, alegando que tal sacerdote había sido contratado por su persona con anterioridad, protagonizando la tan nombrada “I boda Thompson”. Al parecer, el sacerdote crepuscular de aquella ocasión se había reconvertido, afiliándose a la Plaga recientemente. Fuentes confirman la próxima y posible unión de este conocido familiar a la Legión Ardiente.

Tradiciones[]

Tras la llegada a la engalanada Mansión Thompson, se dispusieron los preparativos necesarios para el inicio de los rituales tradicionales, tan típicos en la historia Thompson como la adquisición y el legado de títulos.

"Marmota muerta, año de reyerta"[]

La tradición Thompson marca que todo casado que se precie debe concluir el rito iniciático de la marmota. El animal se coloca, normalmente, en una superficie plana y ha d

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"Dicen que la desnucó. No pude mirar" -Nyah Thompson

e ser eyectado con una fuerte patada. El móvil del proceso es que el animal recorra el máximo de metros posibles, muriendo en el choque o el acto. Si el mamífero fallece por la contusión (debido, posiblemente, a un fallo orgánico), significará que el enlace será próspero. Normalmente, es la novia quien “patea a la marmota”.

El abuelo de la novia, Liam Thompson se dispuso al animal en la veranda o poche de la mansión. Desafortunadamente, el anciano fue incapaz de resistir la tentación de aporrear al animal colocado, por lo que se hubo de colocar una segunda marmota (la de “reserva”), que la novia pateó con todo éxito de resultados.

La prueba del pañuelo[]

La segunda tradición Thompson es la llamada “prueba del pañuelo”. La novia debe someterse a dicha prueba para demostrar su virginidad y pureza. Se ha de tener en cuenta que, en este caso, la novia lucía un estupendo y saludable embarazo de cuatro meses. En las actas, se concluyó oficialmente que se trataba de un “poco de grasa abdominal” o, en su defecto (y más probable) que el embarazo se debiera a la acción de una intervención protagonizada por la “Luz” (o como algunos la llaman; el “Niño Luz”).

Adquisición de títulos[]

Anteriormente a la boda, se propuso el nombramiento de títulos y propiedades a la pareja. Liam Thompson cómo titulador autotitulado de la Casa Thompson, concedió los títulos a los novios. Se redactan, a continuación:

“Marquesa de Esatorre”, “Condesa del Árbol Quemado” y “Señora de la Casa de la Moneda Thompson” a Mávira Thompson.

“Señor de la Cala Vieja”, “Conde de los Cristales” y “Duque del Gatillo” al novio Jacklovicus "Jack" Thompson.

En el banquete estas titulaciones quedaron fijadas, aunque no se sabe con certeza si se otorgaron o no “a devolver”.

El banquete[]

El banquete transcurrió con tranquilidad (para aquellos que congratularon la unión con presentes). La cena se sirvió en cubertería y menaje de oro

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"Tanto lujo para despues tenernos sentados dos por silla" -Tipo de incógnito refiriéndose a los Thompson antes de ser invitado a abandonar la Mansión

y los comensales fueron atendidos, en todo momento y circunstancia, por dos exóticas sirvientas contratadas para la ocasión.

La cena comenzó por un típico brindis Thompson, que concluyeron los novios. Tras la cena, se sacó varias tartas (elaboradas por la más alta repostería gilneana) y se procedió a la entrega de obsequios a los novios por parte de los invitados. Se rumorea que se regalaron desde sombreros de la más alta confección hasta exóticos animales, traído de las altas indias o, lo que es llamado hoy en día, Pandaria.

"Un final feliz"[]

Se clausuró el acto con un pequeño y recogido “baile familiar” (protagonizado por Mávira, Jack y su hija adoptiva Marseline) y el éxodo de los más perjudicados (que fueron amablemente convidados a abandonar el villorrio).

"Los perros necesitan estirar las piernas una vez al día, cojones" -declaró, la mañana siguiente, Vladimirius Thompson, heredero directo de la estirpe Thompson.

Álbum de fotos[]

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