Trasfondo[]
Hormagöden fue un Caballero de la Muerte Taunka al servicio del Rey Exánime en Rasganorte.
Una vez libre de su esclavitud por un Caballero de la Muerte encapuchado líder de una Orden de Caballeros de la Muerte rebeldes, volvió con su pueblo, hasta que ellos fueron encontrados por La Horda y agentes de Acherus.
Prestó su ayuda a la Espada de Ébano devolviendo el favor que le hicieron, como instructor que enseñaba a los Caballeros de la Muerte a combatir eficientemente contra La Plaga en Rasganorte.
Formó a muchos caballeros de la muerte que él elegía personalmente.
Su muerte le llegó a las puertas de la Ciudadela de Corona de Hielo cuando fue alcanzado por un campeón de La Plaga llamado "Von Faunh". El campeón de La Plaga le hirió física y espiritualmente tras emboscarle, provocándole una muerte terrible.
Varios caballeros de la muerte liderados de forma provisional por Snagletooth presenciaron la emboscada de Von Faunh vengó la muerte de Hormagöden acabando con el campeón de La Plaga.
Acto seguido fue llevado a la Cámara de las Sombras pero no se pudo hacer nada por él. Su cuerpo fue llevado a su Poblado natal, Snagletooth se encargó personalmente antes de partir hacia la Ciudadela de Arthas.
Carácter y Apariencia[]
Aunque no siempre, normalmente se mostraba sabio, hábil, tremendamente fuerte y tenía un gran sentido del Honor como el que mostraba el pueblo tauren y orco.
Desde el primer momento entabló fuertes amistades con el pueblo tauren y con los Orcos de Thrall.
También era un gran guerrero, en combate era brutal, se sumergía en una furia incontrolable aunque tremendamente efectiva. Aunque muchos de sus enemigos no sentían miedo alguno por ser No-muertos, muchos compañeros "vivos" temían que un día no pudiera controlar su furia.
Blandía una alabarda rúnica gigante roja y sucia que sumado a su altura, abatía enemigos en grupos de un solo golpe.